Los celos son una emoción natural, como la tristeza o la alegría.
Experimentar la emoción de celos significa que estamos experimentando el miedo a perder algo que asumimos que nos pertenece. Esto que tememos perder y que no queremos compartir puede ser algo material o algo inmaterial, como el vínculo que tenemos con alguien.
Así como existen emociones sencillas y básicas (miedo, ira, tristeza, alegría, asco), existen emociones complejas, como los celos.
Esto quiero decir que la emoción de celos se compone de otras: miedo, ira, ansiedad, vergüenza, inseguridad,…
Cuando hablamos de celos en una relación de pareja, nos referimos a que percibimos la amenaza de que alguien nos arrebatará a la persona querida.
Esta emoción hace que la persona experimente sintomatología que puede llegar a ser muy desagradable; generalmente, sintomatología de ansiedad: angustia, aumento de la frecuencia cardíaca, dolores de estómago, nudo en la garganta, sensación de intenso “nerviosismo”, inquietud,…
Además, se volverá más intensa si, por comparación, interpretamos que ese “alguien” que nos puede arrebatar a la persona querida es superior a nosotros en aspectos que consideramos importantes de nuestro autoconcepto, por ejemplo: apariencia física, extraversión, habilidades sociales,…
Como hemos visto, son una emoción normal, y nos ayudan a identificar vínculos que son importantes para nosotros.
Pero, hay que tener en cuenta que las razones para estar celosos pueden ser reales o imaginadas, es decir, puede que objetivamente nuestra persona querida esté incumpliendo límites establecidos para la pareja o puede que realmente no tengas prueba de ello y estés realizando interpretaciones alejadas de la realidad.
Lo que puede hacer que los celos “se vuelvan algo malo” es la forma que tenemos de transitarlos y que hacemos en consecuencia de estar experimentarlos.
De momento, y para acabar por hoy, podemos decir que, si estas sintiendo celos y tu respuesta es aumentar el control sobre tu pareja pero sin analizar si el peligro es real y sin hablarlo de forma sincera con ella, probablemente estés haciendo más grande el problema y estés sufriendo cada vez más
